
Smart Website: Convierte a tu viejo sitio web en el mejor vendedor de tu equipo con Salva Luca
En la conversación, Javier e invitado coincidieron en que la mayoría de los sitios web actuales no cumplen su función principal. Están diseñados para mostrar información institucional, hablar de la empresa, contar su historia o exponer premios, pero no están pensados para el cliente.
“Lo que uno entra y ni siquiera entiende cuál es el próximo paso, que es como, che, me gustó, te quiero comprar y ni siquiera está claro qué tengo que hacer para comprar esa solución.” — Salva Luca
El concepto de Smart Website apunta a cambiar esa realidad. No se trata de tener una página bonita, sino de contar una historia que coloque al cliente como héroe y a la empresa como guía.
El objetivo es que el visitante entienda en segundos qué problema resolvés, cómo lo hacés y qué debe hacer para avanzar.
El test del cavernícola: claridad en 5 segundos
Uno de los recursos mencionados en el episodio fue el test del cavernícola, inspirado en Donald Miller y su framework StoryBrand. La idea es simple: cuando un visitante entra en un sitio, en los primeros segundos debería poder responder cuatro preguntas esenciales:
¿Qué hace esta empresa?
¿Cómo va a mejorar mi vida?
¿Qué tengo que hacer para contratar?
¿Por qué debería confiar en ellos?
“Son tres cosas en cinco segundos. ¿Quiénes son? ¿A mí qué me importa, qué me solucionan? ¿Y cuál es el próximo paso?” — Salva Luca
Este ejercicio muestra lo rápido que alguien decide si quedarse en una web o abandonarla. Por eso el hero section —la primera pantalla visible— es crítica.
Allí deben estar el título, subtítulo, botones de acción claros, una imagen relevante y, si es posible, credenciales o logos de clientes para generar confianza antes de hacer scroll.
El error más común: hablar de la empresa en vez del cliente
La conversación también puso en evidencia un error que se repite en la mayoría de sitios: hablar desde el ego corporativo.
“Eso pecan del síndrome de mirarse el ombligo […] están construidos desde alguien que puso mucho tiempo en su empresa y tiene muchas ganas de contar quién es y qué es esa empresa. Y en realidad el sitio ese debería estar al servicio de una persona que tiene un problema y está buscando la solución que esa empresa soluciona.” — Salva Luca
El desafío está en dar vuelta la narrativa: dejar de hablar de misión, visión y valores en el primer pantallazo, y enfocarse en cómo la empresa resuelve un problema específico.
Un Smart Website logra que el cliente piense: “estos me entienden, tienen la solución que busco, quiero seguir leyendo”.
El cliente es el héroe, no la empresa
El framework de StoryBrand ayuda a estructurar la comunicación del sitio como una historia. El error es pensar que la empresa es la protagonista. En realidad, el héroe es el cliente, y la marca debe posicionarse como guía.
“La historia que vamos a contar es la de tu cliente, es la del héroe. […] No me importa tanto tu historia, me importa qué aporta tu producto o servicio a mi vida como cliente.” — Salva Luca
De esta forma, la web se convierte en un espacio donde el visitante se ve reflejado, reconoce su problema y encuentra el camino hacia la solución.
Tecnología al servicio del negocio
Además de la parte editorial, un Smart Website requiere tecnología que lo respalde. Hoy existen herramientas que permiten que una web atienda clientes en tiempo real, precalifique leads y automatice tareas.
“Si vos para cambiar un título tenés que subir un requerimiento a alguien o mandar tres mails […] no sirve, no es smart, es dumb.” — Salva Luca
Entre las tecnologías mencionadas destacan los chatbots con IA, capaces de responder preguntas frecuentes, derivar leads según su calificación e incluso agendar reuniones automáticamente. Lo más relevante es que funcionan 24/7, atendiendo oportunidades fuera del horario comercial, algo impensado con un equipo humano.
El segundo eje son las automatizaciones: desde emails de confirmación hasta secuencias en WhatsApp que nutren al cliente y reducen la tasa de “no show” en reuniones.
Los 5 principales errores (los “fuck ups”)
Durante el episodio se armó un ranking con los errores más frecuentes al intentar tener un Smart Website:
No pedir testimoniales ni prueba social. Los reviews siguen siendo una de las herramientas más poderosas para generar confianza.
Call to actions genéricos o invisibles. El botón tiene que estar antes del scroll y debe ser claro en qué pasará al hacer clic.
Sitios no persuasivos y mal adaptados a mobile. La mayoría de los usuarios navega desde el celular.
No pensar qué pasa después del clic. La gestión de leads y la secuencia posterior son tan importantes como el diseño.
No comunicar ni distribuir el sitio. Invertir en un Smart Website y no llevar tráfico a él es como abrir una tienda con la persiana baja.
A este listado se sumó un “bonus”: no optimizar continuamente. Un Smart Website nunca está terminado, siempre debe probarse y ajustarse para mejorar resultados.
Un sitio web como el mejor vendedor de tu equipo
El impacto de tener un Smart Website bien implementado es enorme. No solo mejora la percepción profesional de la empresa, sino que abre oportunidades de negocio constantes y mejor calificadas.
“Con relativamente poco trabajo podés tener al vendedor más importante y más efectivo de tu empresa en ese sitio web.” — Salva Luca
La conclusión es clara: dejar atrás los sitios estáticos y poco útiles para pasar a una versión dinámica, optimizada y respaldada por tecnología que trabaje día y noche.
Escucha el episodio completo
Escúchalo ahora en Spotify o YouTube.
Takeaways:
✅ Un Smart Website se centra en el cliente, no en la empresa.
✅ El test del cavernícola asegura claridad en segundos.
✅ La tecnología (IA, chatbots, automatizaciones) convierte la web en un vendedor 24/7.
✅ Los errores más comunes son falta de prueba social, CTAs débiles y no pensar el “después del clic”.
✅ Un Smart Website nunca está terminado: debe optimizarse de forma continua.
Si querés profundizar en smart website y descubrir cómo aplicarlo para vender más y mejor, no dudes en contactarme en https://javieryranzo.com/.